Hace solo cinco años, la diminuta población isleña de Punta Allen, ubicada en la parte nororiental de México, se vio prácticamente aislada del mundo exterior cuando las empresas telefónicas abandonaron las conexiones fijas del lugar. Desde entonces, WhatsApp se posicionó como el principal método de comunicación de sus 700 residentes, quienes lo usan para mantenerse en contacto entre ellos y con el resto del mundo.
Elsy Ramírez, quien usa WhatsApp para comunicarse con sus vecinos y mantenerse en contacto con empresas en el centro regional de Tulum, comenta que las cosas nunca volverán a ser como eran antes, ya que WhatsApp es mucho más confiable.
Punta Allen les brinda a Elsy y Nicolás, su hijo de dos años, el estilo de vida perfecto. Ella trabaja en la industria turística local mientras él se cría en una unida comunidad costeña. Sin embargo, el pueblo está a cinco horas de distancia del lugar donde residen los padres de Elsy, por lo que se le hace imposible visitarlos con frecuencia y muy costoso llamarlos por teléfono móvil. Para Elsy, WhatsApp es el método más confiable y económico que tiene su familia para ver crecer a Nicolás.
Aunque no estén físicamente juntos, sienten como si lo estuvieran. Elsy comenta que WhatsApp les permite crear recuerdos en familia y gracias a que su hijo puede hablar con sus abuelos mediante videollamada, los reconoce fácilmente, lo que hace que las visitas en persona sean más emotivas.
Los residentes de Punta Allen usan los grupos de WhatsApp para coordinarlo todo, desde los días de limpieza de las calles hasta las reuniones de la comunidad, así como para notificarse mutuamente cuando llega el pan dulce, cada tres días. WhatsApp también les ayuda a modernizar uno de sus oficios más antiguos, la pesca de langosta.
La Cooperativa Pesquera de Vigía Chico, una organización de más de 50 años, se enorgullece de haber desarrollado un modelo de pesca sostenible de clase mundial que, en su opinión, puede ayudar a contener las prácticas de pesca excesiva en el Mar Caribe. Los 75 miembros de la cooperativa usan WhatsApp para coordinar todos los aspectos de su oficio, incluida la cantidad de pescadores que se embarcan cada día.
Alejandro Velázquez, tesorero de la cooperativa, comenta que con WhatsApp, solo tiene que enviar un mensaje de texto para preguntar a quién le corresponde pescar al día siguiente, y explica que antes de contar con la herramienta, debía ir de casa en casa todas las noches para coordinar las actividades del día siguiente. Los pescadores se aseguran de no pescar más de lo necesario para que sus hijos, la próxima generación, pueda seguir pescando langostas.
Alejandro describe WhatsApp como un faro para su comunidad. Sus amigos que están cerca del puerto le advierten sobre cualquier problema que pueda tener el bote y los demás miembros del grupo de WhatsApp de la cooperativa comparten información sobre sitios de pesca, el estado del tiempo y la venta de sus mejores pescas a algunos de los restaurantes y resorts de clase mundial de la zona aledaña de Tulum.
Los residentes de Punta Allen han trabajado muy duro por lograr que la isla sea autosustentable y, hoy en día, WhatsApp les ayuda a garantizar que los lazos que unen a sus habitantes se mantengan fuertes y más personas puedan conocer acerca de su estilo de vida ecológico.